Escuelas aceleradas

En primer lugar, debemos tener en cuenta que el modelo de escuela tradicional no es el único que existe, no todas las escuelas se tienen que estructurar por edades y trabajar por asignaturas.

Las escuelas aceleradas tienen como principal objetivo lograr la igualdad entre todos los alumnos. Van dirigidas a aquellos alumnos que tienen más problemas en su proceso de enseñanza-aprendizaje, es decir, aquellos alumnos más desaventajados. Lo que pretenden es romper con la idea de bajar el nivel cuando se enfrentan a un alumno que tiene dificultad en el aprendizaje. Al contrario, estas escuelas buscan la forma de subir el nivel ante esta situación.

         En este tipo de escuelas la administración le da un poder absoluto de libertad por lo que cada escuela acelerada tiene su propio proyecto. Este proyecto debe hacerse en consenso entre padres, alumnos y profesores. La idea principal es motivar a los alumnos y tratarlos como si fuesen alumnos brillantes.

         Se puede dar el caso de encontrarnos con unos alumnos que tienen un aprendizaje lento debido a que no entienden bien el idioma. Ante esto tenemos dos opciones: exigirle menos y que finalicen la etapa de infantil sólo sabiéndose la vocal a, o bien plantearnos métodos alternativos para que aprendan lo mismo pero con un refuerzo continuo.

Es importante tener en cuenta que en este tipo de escuelas la etapa de infantil se configurará de manera global, no por niveles sino con objetivos generales de ciclo.

         En conclusión, hoy hemos aprendido que existen más modelos de escuela a parte del que todos conocemos. No es fácil llevar a cabo este proyecto de escuelas aceleradoras ya que necesita una implicación mayor y debemos de tener en cuenta los materiales que tenemos en la escuela y si en ella se puede llevar a cabo.

Normalmente este tipo de modelo educativo lo llevan a cabo escuelas privadas ya que cuentan con más flexibilidad en los proyectos.

En general, me ha gustado la idea que tienen este tipo de escuela ya que pretende explotar al máximo las cualidades de los alumnos, no bajando el nivel sino logrando que con sus actitudes desarrollen sus competencias. Siempre teniendo en cuenta que este modelo no funciona correctamente en todos los sitios ya que necesita de mucha implicación por parte del centro, de las personas que trabajan dentro de él y por supuesto la implicación de los padres.